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Fue el viento que logró sacarme del ensimismamiento vago en el cual siempre me sumerjo para viajar, el frío entumía cada extremidad de mi cuerpo mientras esperaba el motor, sus ruedas y todo el armatoste correspondiente para transportar al respetable. El otoño se hacía presente, gris el cielo, los álamos agitaban el verdiamarillo de las hojas que caían. Como siempre han caído, bamboleándose unas, otras vertiginosamente, para cubrir de una vez por todas el cuasi espejismo de amargura del asfalto, moteándolo, haciéndolo el jaguar manso, sumiso a las llantas que lo recorren en cada centímetro de su anchura y largura.
4 comments:
ESTA BUENO.YO TAMBIEN MANDE UNO PERO ESTOY SEGURO QUE ME VAN A MANDAR A LA CHUCHA PORQUE HICE CAGAR EL TRANSANTIAGO.
cacha este es el link del compadre que se hace pasar por ti,yo cacho que hay que pitearselo,lo malo que vive muy lejos.
http://www.albordedelcaos.blogspot.com/
Texto pinédico.
Marcelo cómo es que has podido encontrar a 2 Davides Pineda en paralelo, es el colmo.
Esto es otra prueba que indica que el mundo está llendo para cualquier lado.
Saludos
Me pasa Pineda que cuando leo gueas tuyas no me calza contigo, es raro.
Pienso, cómo este gueón escribe estas gueas? Bueno filo, me gutó más el poema de 2 post más abajo.
Igual si ganai, mínimo un asado o un financiamiento de revista.
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